Fe en el equipo y en el trabajo que se hace. Es el argumento que manejó el Granada CF para superar a la UD Almería en el último momento para sumar un nuevo triunfo en casa.
El Granada CF dominó con claridad en el primer tiempo, hasta alcanzar una posesión del 71%. Tras unos primeros minutos de mayor amenaza almeriense, los rojiblancos comenzaron a hacer su juego y a sumar ocasiones. Las tuvieron Vadillo, Germán o Rodri. El primer acto finalizó con tres amarillas: la primera para Puertas por, supuestamente, simular un penalti; a Rodri y a Germán por protestas.
La segunda mitad siguió parámetros parecidos, con una UD Almería más parapetada cerca de su área y buscando la contra con mayor descaro. Alguna tuvo. Alguna desbarató Rui Silva con reflejos. El dominio local siguió sostenido. Con valentía. El gol se hizo esperar, pero llegó. Lo marcó Pozo con un remate en dos tiempos poco antes del final.