Emotivas palabras de despedida del delantero nigeriano
Hoy es un día agridulce para mí, porque a través de esta carta, quiero despedirme de la mejor afición que se puede tener, de mis compañeros, de todos los trabajadores del club que tanto me han apoyado desde que llegué a Granada, además de esta ciudad que me ha dado todo.
Hace dos años vine a esta increíble ciudad, con un sueño. Sueño que perseguí desde que era niño y jugaba en mi ciudad. Desde Benin City se veía tan lejano poder jugar en Europa, ser una estrella, uno de los grandes, que gracias al mundial sub-17 en 2013 y pude comenzar a vivirlo.
Empecé en el juvenil, pero enseguida pasé al filial, del que solo tengo palabras de agradecimiento para todos mis compañeros de vestuario. Antes de que acabara esa temporada ya fui convocado con el primer equipo, y sentí que gracias a mi trabajo diario, ese sueño iba siendo una realidad.
En la temporada siguiente tuve la suerte de que apostaron por mí desde el principio, y pude crecer dentro de la primera división española, pude jugar contra los mejores, pude disfrutar de tantas cosas en tan poco tiempo que no sé cómo describir con palabras estos dos años en este club que me ha hecho crecer y me ha dado todo lo que soy a día de hoy. Tengo que agraceder a todos los entrenadores que apostaron en mis condiciones durante estos años, pero en especial a Sandoval y su equipo técnico que me dio la confianza suficiente para poder ser mejor cada día
Gracias de corazón a todos los que habéis estado ahí, a todos los que me habéis seguido. Siento si en alguna ocasión no he dado todo lo que se esperaba de mí, pero mi intención ha sido siempre dar el máximo y superarme cada día.
Ahora comienzo otra etapa profesional, que no hubiera sido posible sin mi aprendizaje y desarrollo en el Granada.
Por eso me despido dando las gracias y diciendo que esto no es un adiós, es un hasta pronto, porque espero que la vida ponga otra vez en mi camino este club al que tanto le debo.
